SUELOS Y PAREDES
Los acabados son fundamentales para terminar y completar un proyecto de arquitectura de interiores. El suelo es un elemento decisivo para el resultado final y tiene un papel crucial en el diseño porque cumple varias funciones: no sólo uniforma la superficie para caminar, sino que también contribuye a la estética de un espacio. Existen muchos tipos de suelos y revestimientos en el mercado, pero básicamente existen dos macrocategorías identificables:
- Suelos interiores
- Suelos de exterior
Los suelos interiores varían según la estancia a revestir. En el baño y la cocina, por ejemplo, es recomendable utilizar suelos de cerámica, clinker o gres, evitando los suelos de madera. En el dormitorio y en el salón, sin embargo, un suelo de terracota o parquet será la elección perfecta. Los suelos exteriores cubren las superficies de balcones, terrazas y entradas de vehículos, por lo que deben ser suelos transitables. Para la zona del cenador, sin embargo, puede optar por una tarima de parquet. Los más vendidos, sin embargo, suelen ser los suelos de gres y los suelos cerámicos.